Te quiero...
No te quiero por todos los poemas
que mientras te recuerdo me haces escribirte,
ni por las horas y los minutos
que me robas a cada segundo sin darte cuenta.
No te quiero por tu valentía
sino por tus miedos,
y por verte correr hacia mí en tu auxilio,
y ser en medio de ellos refugio y consuelo.
No te quiero por los días que han pasado
sino por los que hacen falta,
te quiero porque con tu risa
sobreescribes en mi alma más que sólo esperanza.
No te quiero por la alegría que me regalas
ni los sueños insomnes que en mi alma despiertas,
te quiero por tu alegría,
y por tus sueños que florecen día con día.
No te quiero por tus respuestas,
ni por tus calladas preguntas,
te quiero por tus acciones
que son testamento de cuanto amas.
No te quiero porque dices que este amor no se acaba,
ni porque armas el futuro y sin tí no hay futuro,
te quiero porque un amor como el nuestro
es difícil y de coraje, e imposible si no existieras.
No te quiero por tus besos
ni por la calma de tus abrazos,
te quiero por el aire de tus labios
que saben resumir mi alma en una frase.
No te quiero porque tu amor es remedio,
y tus ojos más que mi reflejo,
te quiero por el misterio detrás de tu mirada
y por la caricia que deja tu recuerdo a mi paso.
No te quiero por el roce de tus labios sobre los míos,
ni por cuando tus manos pasean por las mías,
te quiero por los celos que causas a los luceros
por no poder encontrar entre ellos caricias como las tuyas.
No te quiero por tu rostro maquillado de noche
cenando frente a una vela que calla verdades,
te quiero por tu rostro sincero de mañana
y pensar que mi día ha nacido para ver tu mirada.
No te quiero porque somos dos mitades
que juntas forman un todo;
te quiero porque somos un todo,
que no se puede partir ni siquiera en mitades.
Felipe Carvajal. 21 - Nov